El Molino de los Secretos (Almoguera) - Almoguera, Guadalajara

Jesús M. M. G. (.

De cuento

La casa está ubicada en un enclave maravilloso de la provincia de Guadalajara, rodeado de varios pueblos pequeños con mucho encanto y en todos hay algo que ver.

La casa dispone de infinidad de habitaciones, todas ellas con baño en suite, todo tipo de comodidades tanto interiores como exteriores, así como, es apta para todo tipo de reuniones, parejas, amigos, familia, fiestas,…así como preparada tanto para la época invernal como estival. Tiene chimenea, calefacción centrar y splits de frío y calor en todas las habitaciones.

El resto de sus estancias (cocina, salón, salas de estar, exterior,…) cuenta con todo tipo de comodidades para disfrutar de unos días de desconexión.

En nuestro caso, la única pega que hace no ponerle un cinco, es que tras pasar el pasado fin de semana, dejan leña para un día, el resto hay que pagarla y bien pagada, cosa que hasta el día de hoy en todas las casas rurales que he frecuentado, dejaban leña de sobra para varios días. Otra, es la cocina, en un primer vistazo dispone de todo lo necesario (lavavajillas, horno, fuegos,…) pero el funcionamiento del horno es cuestionable y en el caso de los fuegos solo pudimos poner en funcionamiento uno de ellos.

Gabriel D. B.

Un lugar bonito, decorado con buen gusto, con todas las necesidades para el bienestar de los viajeros cubiertas.
Ideal para grandes grupo de personas.

Jose V. G.

Donde cualquier persona soñaría con pasar un fin de semana con 10 amigos en un entorno perfecto.
La casa espectacular en todos los sentidos y detalles. Las habiaciones personalizadas con colchones fantásticos y una cocina de ensueño para los cocinillas.
El jardin es una maravilla con frutales y super bien cuidado. Los anfitriones pendientes.
En resumen....Inolvidable y para repetir.

Covadonga C.

Hemos estado en el fin de semana del 17 y 18 de junio 2017 y todo ha estado estupendo. La atención inmejorable, las habitaciones preciosas y la decoración con mucho gusto. Tuvimos una celebración familiar y la cena fue exquisita, además teniendo muy presentes las alergias e intolerancias que hay en la familia. Lola y Carlos hacen que te sientas como en tu propia casa. Desde luego es una experiencia para repetir y repetir una y otra vez.

Oscar C.

Sitio muy especial donde pasar buenos ratos. Las habitaciones muy acondicionadas y correctas. En general muy acogedor y divertido. Es como estar en casa. Lola la dueña y cocinera te hace sentir en casa y ofrece grandes momentos culinarios que no tiene desperdicio.

El sitio tiene un patio que tiene que ser espectacular en verano, puesto que cuando hemos estado hacia frío y no se podía estar cómodo.

Posee dentro sitio para dejar el coche, pero en caso que no se pueda fuera hay sitio de sobra.

Muy recomendable y seguro que el que se tenga pensado ir, que no dude ni un minuto. Para las cenas hay menú degustación, preguntar por el precio y lo que te ofrecen esa noche ... es menú cerrado.

Espero que os guste.

Esmeralda G.

A veces una simple nota se queda corta. Lugar precioso, de ambiente rural pero con un mimo especial y buen gusto en todos los detalles. Habitaciones con todas las comodidades propias de hoteles de categorías superiores. Experiencia completa para los sentidos: sonidos y olores de la naturaleza y comida casera difícil de igualar. Todo ello con la complicidad y el cariño de los anfitriones Carlos y Lola, que se preocupan de que estés mejor que en tu propia casa. Ideal para desconectar y dejarse mimar.

nuria T.

La casa está muy abandonada. Decepciona la poca limpieza de la cocina y el escaso menaje para tantas personas como puede albergar. Sale agua por debajo de la nevera y se moja el suelo constantemente. No funcionaba el fuego principal de la cocina por lo que nos resultó difícil cocinar para 11 personas. La barbacoa del patio muy sucia también por lo que no daban ganas de utilizarla.
Las habitaciones y baños sin embargo estaban limpias y las camas son cómodas. Una pena que la casa y el jardín no estén nada cuidados.

Nicolesa O. D. R.

Yo estuve este fin de semana 14-15 de enero, era el regalo de cumpleaños de mi chico. Y nos encanto, es como si estuvieras en casa, el molino precioso, nuestra habitación una pasada, la comida muy rica, con muchas cosas caseras hechas por Lola que es anfitriona, y el trato inigualable. La verdad muy recomendable, por las fechas no pudimos disfrutar del exterior de la finca, pero disfrutamos del calor de la chimenea :). Seguro volveremos. Gracias Lola y Carlos. Un beso.