Colegiata de Santa María - Villamanín, León

La Colegiata de Santa María, ubicada en Villamanín, León, es un impresionante monumento histórico que ofrece a los visitantes una experiencia única en el tiempo. Se recomienda encarecidamente a los amantes de la historia, la arquitectura y la tranquilidad visitar este lugar, que se ha convertido en un referente cultural de la provincia.

Ubicación e Historia

La Colegiata se encuentra estratégicamente en la carretera N-630, número 4, en el municipio de Villamanín (código postal 24690). Su ubicación, en la zona de Arbás del Puerto, cerca del alto de Pajares, la convierte en un punto de referencia accesible, pero a la vez alejado del bullicio urbano, promoviendo una atmósfera de paz y contemplación. Originalmente construida como un monasterio, la iglesia evolucionó a lo largo de los siglos hasta convertirse en una impresionante colegiata, reflejo de una rica historia religiosa y social.

Características Arquitectónicas

La Colegiata de Santa María es un ejemplo sobresaliente del románico tardío, con elementos que fusionan la tradición románica con influencias góticas. Se caracteriza por su imponente fachada principal, adornada con pilastras robustas, arcos de medio punto y una portada esculpida. El interior alberga un impresionante crucero, capillas laterales ricamente decoradas y un bello retablo mayor que invita a la reflexión. La construcción, realizada en piedra, demuestra una maestría en el trabajo artesanal y una atención al detalle notable. Se puede apreciar una clara dedicación a la estética y a la funcionalidad, evidenciando el compromiso del arquitecto original con la creación de un espacio sagrado digno de veneración.

Información Relevante para el Visitante

• Teléfono: 987598009
• Página web: (No disponible)
• Especialidades: Iglesia católica, Atracción turística
• Opiniones: Cuenta con un alto número de valoraciones positivas en Google My Business (261 valoraciones con una media de 4.7/5).

La Colegiata, hoy gestionada por una asociación, se ha abierto al público, permitiendo a los visitantes adentrarse en su historia y admirar su belleza arquitectónica. Se han realizado importantes trabajos de restauración que han permitido recuperar su esplendor original. La donación que se realizó para su conservación es un testimonio del valor que la comunidad local atribuye a este patrimonio histórico. Es un lugar que transmite una sensación de conexión con el pasado, evocando anécdotas como la del oso y el buey, que enriquecen la experiencia del visitante y sugieren un pasado lleno de significado. El ambiente sereno y la atmósfera contemplativa invitan a la reflexión y al disfrute de la belleza artística y arquitectónica.

En definitiva, la Colegiata de Santa María es un destino que merece la pena descubrir. Su ubicación, su arquitectura y su rica historia la convierten en una experiencia inolvidable para cualquier persona interesada en la cultura y el patrimonio histórico español. Se recomienda planificar la visita con antelación, especialmente en temporada alta, para asegurar una experiencia tranquila y enriquecedora.

👍 Opiniones de Colegiata de Santa María

Monica A.

5/5

Me parece muy buena iniciativa que esté abierta y se pueda visitar tranquilamente. Está situada en Arbás del Puerto, cerca del alto de Pajares. Y su estilo es romántico tardío.

Germán R. (.

5/5

Quedé encantado con la visita.
Lugar mágico, de mucha paz.
Te transmite al pasado y a su historia llena de anécdotas como la del oso y el buey. También del arquitecto que se implicó e hizo posible que podamos disfrutar ahora de ésta abadía.
La donación está más que justificada
GRACIAS A LA ASOCIACIÓN POR ESAS PUERTAS ABIERTAS.

Leon R.

5/5

Iglesia románica situada entre Asturias y Leon. Aprovecha para visitarla si la ves abierta (no lo está todos los días). Dice la leyenda que durante su construcción, un oso mato a uno de los bueyes destinados al transporte de la piedra. El animal fue
castigado a sustituir a la bestia a la que había dado muerte. El oso realizo dócilmente su tarea bajo el yugo y junto al otro buey. Por esa razón, se representan ambos animales en la portada del lado occidental de la colegiata.

Rosa M. R. M.

5/5

Descendiendo del Puerto de pajares, no encontramos este regalo de Colegiata. Su origen fue un hospital para los peregrinos que iban camino de Oviedo cuya fundación se atribuye al conde leonés Fruela Díaz y su esposa Estefanía Sánchez.​ Desde León, ciudad por donde pasa el denominado Camino de Santiago Francés, Estilo tardiorromanico. Mi visita fue gratuita.

J.R. L.

5/5

Una maravilla poco reconocida en un camino lleno de una difícil historia para unir Asturias con León y la meseta.

Carlos G. D.

5/5

El conde Fruela Díaz y su esposa Estefanía, que tenían vastas propiedades por toda esta región, en torno a 1116 quisieron fundar un albergue u hospital de peregrinos que sirviera de refugio protección y descanso a los viajeros que frecuentaban esta zona desde la Meseta camino de Oviedo en cuya Cámara Santa de la catedral veneraban las numerosas reliquias que allí se guardaban. Muy a menudo estos viajeros continuaban desde Oviedo el Camino de Santiago. Este tipo de albergue-refugio proliferaba en los lugares donde era necesaria la custodia de los caminantes, por ser sitios apartados y poco concurridos. Contaban con hospital y capilla en el puerto de San Glorio, puerto de Pandetrave, puerto del Pontón, puerto de Ventaniella, puerto de Tarna y puerto de San Isidro entre otros. El paso por Pajares era especialmente peligroso.

Javier B.

5/5

Una colegiata preciosa y de visita obligada. No te la pierdas. Pasarás por la misma si estás haciendo el camino de Santiago en su variante asturiana. En una de las entradas podrás ver la cabeza de un oso y un buey, que forman parte de la leyenda de la construcción del templo. Si quieres conocerla, acércate a los paneles de información que se encuentran a pocos metros.

Wladimir J. A.

4/5

Modifique la ruta entre Oviedo y León solo para ver este monasterio. Estaba envuelto en niebla y casi no se veía, pero no me arrepentí, por el aire misterioso de esta magnífica obra románica, con el sonido de las campanas de un rebaño de vacas de la raza asturiana que se recogía atrás del mismo... Una pena que parezca un poco abandonado, así como el pueblo alrededor.